¿Sabías que la conservación y mantenimiento de carreteras tiene una influencia muy directa en la reducción de emisiones de CO2?
Investigadores, administradores de carreteras y profesionales del sector viario así lo han demostrado. Mantener el pavimento en correctas condiciones no sólo mejora la circulación de nuestro vehículo, reduce el riesgo de accidentes, disminuye el consumo de combustible y prolonga la vida del vehículo, sino que también afecta a la actividad y a la calidad de vida de todos los ciudadanos por su impacto en el consumo de combustible, el ruido generado entre neumático y pavimento y en las emisiones de gases de efecto invernadero.
La Asociación Española de Fabricantes de Mezclas Asfálticas (Asefma) defiende -tal y como lo expresa en las Conclusiones de la XII Jornada Nacional de Asociación Española de Fabricantes de Mezclas Asfálticas-, la necesidad de adaptar las carreteras para hacerlas más “sostenibles y amigables con el medio ambiente, innovadoras, inteligentes y seguras“. Afirma que el sector del asfalto es uno de los que más pueden contribuir a hacerlo posible, dentro del ámbito de la carretera, por su alta capacidad innovadora. Actualmente hay 35 proyectos nacionales e internacionales de I+D sobre mezclas asfálticas en curso.
Si lo traducimos en números, desde la Asociación Europea de Asfalto y Pavimentación (EAPA, por sus siglas en inglés) se cuantifica en 28 millones las toneladas de CO2 procedentes del transporte por carretera que se pueden evitar con acciones de conservación viaria. Esta cifra corresponde al incremento de consumo de combustible y de emisiones en la Unión Europea, que se estima que derivan de pavimentos mal conservados respecto a los que se mantienen en estado óptimo. Según EAPA, las carreteras en la Unión Europea mueven 110.000 millones de euros al año y producen 600.000 empleos: cada euro invertido en carreteras genera tres euros en actividad.
Desde el ámbito gubernamental, el Ministerio de Fomento muestra su compromiso con la reducción de las emisiones de CO2 y el cumplimiento de los objetivos marcados por la Conferencia de París sobre el Clima (COP21), mediante acciones concretas tanto en materia de infraestructuras como de transporte. Cuantifica que el 25% de las emisiones totales corresponden al sector del transporte y, de ese 25, las carreteras son responsables del 92%.
Fomento está llevando a cabo medidas destinadas a lograr mayor eficiencia energética y reducción de emisiones de gases contaminantes, como es la reutilización de residuos en mezclas bituminosas, de acuerdo a una circular de la Dirección General de Carreteras, relativa a la reutilización de firmes y la inclusión de valores medioambientales en los pliegos de condiciones de contratación.
Y es que desde la Dirección General de Carreteras se quieren realizar mejores evaluaciones de ofertas presentadas por empresas constructoras, reconociendo el esfuerzo que realizan los fabricantes de mezclas asfálticas por producir y aplicar mezclas de manera sostenible con el medio ambiente, tanto en obras de rehabilitación de firmes como en las de conservación integral.