Serie Construcción 4.0/ Episodio_1
Javier González, director de Formación y Empleo de la Fundación Laboral de la Construcción
El modelo tradicional de construcción se caracteriza por un modelo jerárquico y secuencial, es decir, en general una nueva etapa se inicia cuando se ha terminado la anterior. Por ejemplo, el cerramiento de un edificio no se realiza hasta que no finaliza la cimentación y la estructura.
Esto se debe a que la mayoría de los trabajos de edificación como estructura, cerramientos, instalaciones, acabados etc., se realizan en el lugar donde va a estar ubicado el edificio, es decir “en obra”. Es cierto que la mayoría de los materiales y componentes que se emplean, como, el ladrillo, los revestimientos, las ventanas, los sanitarios etc., se producen en fábricas o talleres, pero se unen entre sí “en la propia obra de construcción” de forma manual, principalmente mediante pastas y morteros, concretamente mediante lo que se denomina “juntas húmedas”.
La construcción industrializada apuesta por la transición de un modelo de producción tradicional (trabajo manual en obra) a un sistema basado en la industria manufacturera, tratando de asemejarse en estrategias y procedimientos.
Esta realidad se puso de manifiesto durante el evento “Profesionales 4.0. La revolución Digital del Empleo”, celebrado en el espacio Fundación Telefónica el pasado 16 de junio, a través de la intervención del director de Formación y Empleo de la Fundación Laboral de la Construcción, Javier González, presentación que se puede consultar en el siguiente enlace:
Esta nueva manera de construir tiene las siguientes características principales:
- Aplicación de nuevas técnicas de gestión.
- Fabricación de componentes fuera de la obra (off-site).
- Reducción o eliminación de tiempos de espera y acopio en obra.
- Racionalización y mecanización de las operaciones de montaje en obra.
- Aplicación de las tecnologías de la construcción 4.0 en el proceso productivo.
Tecnologías de la construcción 4.0
La diferencia entre las experiencias de industrialización del pasado y las actuales radica en la oportunidad de implementar las tecnologías de la industria 4.0, que posibilitan una mayor eficacia y calidad en el proceso constructivo, así como una producción flexible y personalizada adaptada a las necesidades de cada proyecto.
Construcción 4.0. Internet de las cosas (IoT)
Los datos que se generan de las obras se obtienen por el IoT y sirven de ayuda para tomar mejores decisiones, anticipar problemas, dar soluciones, predecir compras y precios, etc.
Construcción 4.0. Building Information Modelling (BIM)
El uso de BIM en la construcción industrializada permite testar en el “gemelo digital” aspectos como: la cantidad de materiales; la secuencia de montaje; las interdependencias de los sistemas de construcción, que se analizan y se ensayan en el modelo 3D para que nada quede al azar en la fase de montaje.
Construcción 4.0. Realidad Aumentada (AR)
Esta tecnología permite comprender mejor la información contenida en los modelos BIM, permitiendo superponer visualmente la información del modelo a la obra física. Por ejemplo, es posible ver por donde discurren elementos como instalaciones todavía inexistentes, con el fin de saber dónde han de situarse con posterioridad.
Construcción 4.0. Drones
Este tipo de vehículo aéreo no tripulado es un equipo muy útil para obtener datos, integrables en el modelo BIM, en las distintas fases del ciclo de vida de una edificación. Entre otras aplicaciones, se pueden utilizar para obtener datos topográficos del terrero o geometrías de edificios existentes.
Construcción 4.0. Impresión 3D
La fabricación aditiva o impresión 3D consiste en la fabricación de elementos de tamaño variable mediante la adición continua de pequeñas cantidades de un material en estado líquido o fluido que, pasado un tiempo, solidifica y adquiere resistencia.
Construcción 4.0. Robótica
La robótica aplicada a la construcción se utiliza para sustituir a la persona trabajadora en la realización de tareas peligrosas, y/o complementar su trabajo, aportando capacidades aumentadas; como, por ejemplo, una mayor fuerza, resistencia y precisión, siempre bajo su control y planificación.
La automatización de los procesos constructivos utilizando robots puede mejorar la productividad por la rapidez y precisión que aportan en la ejecución de los trabajos; disminuir los costes de producción; tener un mayor control en las tareas más repetitivas y reducir la siniestralidad.
En definitiva, parece que la industrialización es una realidad más tangible en la construcción, en donde es cada vez más habitual la aplicación de todas estas tecnologías, IoT, Realidad Aumentada, BIM, Drones, Robótica, etc., en los distintos procesos productivos, lo que, además, demuestra que es un sector a la vanguardia de la innovación tecnológica.
Javier González, director de Formación y Empleo de la Fundación Laboral de la Construcción.